
01 Jul Maternidad y Paternidad Adolescente
Para nadie es discutible la complejidad de la adolescencia y vivirla es verse enfrentado a cambios físicos, mentales y emocionales trascendentales. Se nos presentan nuevos caminos, nuevas experiencia, nuevos desafíos que recorremos y vivenciamos a partir de decisiones y elecciones que determinan la persona que se está formando.
Sin embargo, algunas de estas experiencias cambian radicalmente la ruta porque implican tomar responsabilidades mayores como el hacerse cargo de otra vida. Ser mamá y papá adolescente es una problemática que pone en tela de juicio el cómo estamos acompañando y formando a nuestr@s jóvenes en su proceso de crecimiento, donde el objetivo debería estar centrado en ellos mismos, su maduración y formación integral. Pero, enfrentados a esta situación y más allá de la carga valórica que implica ser madre-padre cuando aún no se ha terminado de crecer, lo cierto es que est@s jóvenes se ven obligados a cambiar su proyecto de vida.
“… la maternidad y paternidad adolescente es multifactorial, es multicausal… no es solamente un tema de métodos de regulación de la fertilidad, hay una dimensión afectiva, hay una dimensión de autonomía, de crecimiento en la autonomía de la toma de decisiones… a l@s jóvenes en esta etapa les gusta ir probando… van probando con todo, con su corporalidad también…”
Las estadísticas hoy hablan de una disminución progresiva de niños y niñas nacidos de madres-padres en el rango de 15 a 19 años, pero la cifra se ha incrementado en menores de 15 años. Aunque se reconocen cambios en las políticas pública con mayor acción específica en este tema, los casos siguen siendo demasiados por las consecuencias que ello implica. La deserción escolar, la precarización del futuro laboral y por ende económico son realidades que toman fuerza, más aún cuando la mayor cantidad de casos, como siempre, sigue estando en los quintiles más bajos de la sociedad.
La deuda sigue existiendo… desde la educación, desde las políticas públicas más transversales que involucren las distintas áreas para la solución del problema (educación, salud, desarrollo y justicia social) y también desde la responsabilidad que debemos tomar como comunidad.
Frente a esta realidad, acoger, acompañar y guiar a est@s jóvenes es una tarea de suma importancia para que puedan terminar su crecimiento, su educación y su desarrollo de la mejor manera; para que sus futuras posibilidades no se vean coartadas ni menos anuladas y para que ejerzan su maternidad-paternidad de una manera amorosa, desdramatizada y puedan a su vez formar a es@ hij@ saludable física, intelectual y emocionalmente.
“… habitualmente se hace política pública en nuestro país desde la mirada del riesgo, desde la victimización, desde la mirada como conflictiva que puede tener… nosotr@s estamos mirando esta situación… bueno, está este bebé, está este embarazo, cómo podemos hacer para acompañar esta decisión, cómo podemos hacer que esta vida, en definitiva que está!, … cómo podemos hacer para que genere más vida y sea una oportunidad de desarrollo de ese joven, de esa joven… y cómo ellos pueden ir completando su proyecto de vida con ese bebe …”
“… en los liceos donde estamos, la idea es que nosotros somos como colaboradores del proceso que están viviendo l@s jóvenes, porque es complejo articular el rol de ser joven y estudiante, imagínate cuánto más complejo es articular el rol de joven-madre-padre-estudiante… esa es la articulación que queremos hacer… la escuela, el liceo requiere abrir perspectivas de lo que es el aprendizaje, requiere incorporar vivencias de l@s jóvenes, historias de vida de l@s jóvenes… las trayectorias educativas no las podemos plantear desde la mirada de lo que la escuela quiere…”
En Tenemos Cuerda para Rato, conversamos con Maribel Gálvez Parkes, coordinadora del Programa de Apoyo a la Maternidad y Paternidad Adolecente que realiza la Vicaría de la Pastoral Social y Cáritas, sobre su trabajo, su experiencia y sus reflexiones durante 24 años en este tema.
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En la música disfrutamos de Madonna, Beatriz Piche Malén y Nina Simone.